Semanita en la romántica PRAGA y la fuerte experiencia de BERLIN 2-06 al 8-06

Esta semana tuve la suerte de que me mandaran a laburar a Praga. Es la capital de República Checa y conocida como la “ciudad de las 100 cúpulas”, realmente pude comprobar esto, una geografía que me sorprendió muchísimo. Es como que fuera un valle a la vera de un río, como si fuera el corazón de Europa, me inspiró romanticismo, glamour, un Paris en medio en medio de la región Bohemia. Sinceramente, una ciudad que no hay que perderse, una cupulita al lado de otra, no sabes para donde mirar.
Lamentablemente no pude hacer mucho turismo, pero fui a cenar a la Plaza de la ciudad Vieja que reúne edificios alucinantes tales como el palacio gótico de la Campana; la casa Storch; el templo de San Nicolás; el Ayuntamiento, y la iglesia de Týn. Hay un reloj con el Cucú que hace todo el quilombo y esta barbaro, pero nunca logre llegar a tiempo.
Lo que estuvo copado de este viaje, fue que Johnson&Johnson organizó una cena arriba de un barco por el río (la paso re malll, jajajaja). Osea... no podía pedir más nada, ya que desde el mismo pude ver bellezas como el Castillo de Praga, el Palacio Real Y EL Malá Strana. IMPERDIBLE!
De Praga me fui directamente a Berlín, donde me encontré con Silvita, Chucky, el Pelado y Ariel. Y bueno, llego el momento de decirles que encontré la ciudad con la cual más me he conectado desde que estoy acá, sentí escalofríos y sentimientos muy fuertes en la calles de esta ciudad. Sinceramente, siento mucho respeto por la gente alemana después de haber hecho este viaje, no puedo creer por las barbaridades que pasaron y las cosas que han hecho, tampoco son unos santos, pero la verdad, no creo que ningún otro pueblo en Europa haya vivido tantas atrocidades como el pueblo berlinense. Los lugares que visité:
Fernsehturm en el Alexanderplatz: conocida como la Torre de la Televisión fue el símbolo visible de los avances sociales y tecnológicos del sistema socialista del la ex RDA (República Democrática Alemana). Me levantaba y lo tenía en la ventana del hostel, copado!
Reichstag – Parlamento: Que estructura Por dios!!! Ya verán en las fotos, yo no la podía creer! Tiene una vista panorámica de la ciudad.
La puerta de Brandemburgo: Qué les puedo decir, por ahí pasaron los más grandes de la historia, y YO por supuesto! Je je.
Memorial al Holocausto: Son 2.711 bloques de hormigón de distintas alturas (desde el suelo hasta casi dos metros), es una obra percibida como un laberinto desde el interior que pretende reflejar y hacer sentir a los visitantes la misma angustia y desorientación que padecieron los prisioneros de los campos de concentración nazis. Uff!
Check Point Charlie: Por este nombre se conocia el paso de frontera entre la zona soviética y la zona occidental. Este punto dividía la calle Friedrichstraße en dos partes.
Bebelplatz: La plaza que está rodeada por la Ópera estatal, la catedral católica Santa Eduvigis y la Antigua Biblioteca, hoy en día facultad de derecho, fue escenario de la quema de libros el 10 de mayo de 1933 por los nacionalsocialistas, en la que se quemaron 22.000 libros. Una experiencia muy fuerte.
La catedral de Berlín: Donde metí mis piecitos muertos de calor en la fuente, donde descanse luego de tanto caminar y donde encontré mucha paz.
El Muro de Berlín: Lo más fuerte que he vivido hasta ahora. Que cuelgue me comí, pensé mucho. Realmente, el muro de la vergüenza. Construido en 1961, hoy en día símbolo de la Guerra Fría y de la Antigua Alemania Democrática (RDA) y caído en 1989. Hace tan poco tiempo! Impresionante.
Eso es todo, creo que las fotos demostrarán lo bien que me hizo este viaje.

Romantic Prague

Berlin - Alemania